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martes, 19 de julio de 2011

SEPTIEMBRE

SEPTIEMBRE

La escuadra y el compás



1      La escuadra es nuestra guía, el compás nuestro destino.

2      La escuadra nos fortalece moralmente, el compás espiritualmente.

3      La escuadra y el compás trazan las líneas de nuestra vida, abriéndonos las puertas a una comprensión más profunda a nosotros mismos.

4      La escuadra y el compás revelan la simiente activa de G.·. A.·. D.·. U.·. en cada masón.

5      Cuando la escuadra y el compás se mueven sobre el ara, un nuevo grado se abre camino, un compromiso mayor se hace realidad, para con nosotros mismos y para con la sociedad en su conjunto.

6      Entrelazadas, la escuadra y el compás, crean un solo símbolo de unión y fraternidad.

7      La escuadra es la iniciativa hacia la perfección; el compás es la perfección misma.

8      Cuando la escuadra y el compás se unen, comienza la acción creadora de la mente y el espíritu.

9      La masonería tiene muchos símbolos, pero la escuadra y el compás la identifican y revelan en su misterio de unión y armonía.

10     En la escuadra encontramos la paz, en el compás la armonía; en ambas herramientas entrelazadas, la plena bienaventuranza.

11     En el grado de aprendiz, la escuadra es la luz menor que oculta a la luz mayor; la luz mayor que es el compás, será plena en el grado de maestro masón.

12     La escuadra y el compás nos acompañan durante toda la vida y renuevan su significado día a día.

13     La escuadra nos ayuda a entender las palabras que pronuncia el compás.

14     La escuadra y el compás son símbolos de libertad y compromiso con la libertad.

15     Cuando la humanidad se acerque más a G.·. A.·. D.·. U.·. , Él trazará con las estrellas en los cielos una escuadra y un compás para revelar el tramo final del camino.

16     La escuadra marca las buenas costumbres; el compás la activación de las buenas costumbres.

17     La escuadra es el trabajo paciente y constante; el compás sus frutos.

18     En el camino, un peregrino encontró una escuadra y un compás y no supo qué hacer con ellos; recién cuando los guardó en su corazón, se encontró frente al portal y golpeó decidido.

19     El masón revela su condición de tal cuando su acción está guiada por los susurros que emiten la escuadra y el compás a sus oídos.

20     La escuadra dignifica; el compás enaltece y eleva.

21     La escuadra y el compás trabajan al unísono, así nos enseñan estas herramientas a pensar con el corazón y a amar con la mente.

22     La escuadra y el compás guardan en su punto central a la letra G. Aquél masón que revele su esencia, trabajará acompañado de la invisible pero perceptible presencia de G.·. A.·. D.·. U.·.

23     La escuadra es la perseverancia, el compás su recompensa.

24. Al trabajo de la humanidad lo guía la escuadra; al trabajo de la humanidad enfocada en G.·. A.·. D.·. U.·. lo guía el compás.

25. Cuando se unen la escuadra y el compás cesa el ruido externo.

26     La unión de la escuadra y el compás guardan en sí el secreto del matrimonio perfecto entre el “yo” y el “Ser”.

27     La escuadra y el compás guardan en sí el secreto de la vida y su destino.

28     La escuadra regula las acciones para que el compás las convierta en acciones constructivas hacia la humanidad toda.

29     La escuadra y el compás conjugan en sí los más altos atributos del pensamiento humano que anhela llegar al pensamiento suprahumano.

30     La escuadra es la realidad de los acontecimientos humanos, el compás es la Realidad de G.·. A.·. D.·. U.·. que se revela de ciclo en ciclo.






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